Agosto 2008

Monthly Archive

Sueño nocturno, siestas y asma

R. Ugarte 29 Ago 2008 | : Actigrafía, Cuestionarios, Niño, Siesta

Gail M Kieckhefer, Teresa M Ward, Shao-Yu Tsai, Martha J Lentz. Nighttime Sleep and Daytime Nap Patterns in School Age Children with and Without Asthma. J Dev Behav Pediatr, August 13, 2008;

Objetivo: esta investigación estudia el sueño nocturno y las siestas de manera objetiva y subjetiva en niños asmáticos y no asmáticos de 9 a 11 años de edad.
Métodos: en este estudio se analizaron datos subjetivos obtenidos mediante agenda de sueño y datos objetivos recogidos mediante registro actimétrico en 27 niños con asma y 27 niños sin asma, en ámbito domiciliario y durante un periodo de siete días y seis noches.
Resultados: el 32% de los participantes hicieron siestas. La probabilidad de hacer siestas fue mayor en los niños con asma (12/27 vs. 5/27, p = 0.04), incluso aunque los niños con asma no refirieran estar más cansados, menos alertas o somnolientos por la mañana. Los que hacían siestas no se diferenciaban de los que no las hacian en cuanto a la calidad del sueño total o el número de despertares según los autoregistros. Mediante actimetría se objetivó que la hora de acostarse era más tardía en los que hacian siestas (23:05 vs. 22:21, p = 0.04) y más variable (Test de Varianza de Levine: F = 10.68, p = 0.002) que en los que no hacían siestas. La hora de levantarse no era diferente en ambos grupos, consiguientemente los que hacían siestas tenían menos sueño nocturno (437 vs. 465, p = 0.04). Se documentaron horarios de acostarse más tardíos en niños de otras etnias vs caucásicos (23:01 vs. 22:15, p = 0.01).
Conclusiones: las siestas parecen ser una conducta más común de la esperada en niños con asma o pertenecientes a minorías étnicas pero los motivos no son claros. Los autoregistros pueden no recoger características importantes del sueño que los sistemas objetivos de medición pueden identificar. Es necesario establecer estrategias para evitar que los niños se acuesten tarde y que los horarios de acostarse sean variables, teniendo en cuenta que un sueño de baja calidad conlleva consecuencias negativas de orden cognitivo, emocional y de conducta.

Retraso de fase de sueño en jóvenes

R. Ugarte 27 Ago 2008 | : Adolescente, Somnolencia

I Hazama, Y Inoue, K Kojima, T Ueta, K Nakagome. The prevalence of probable delayed sleep phase syndrome in students from junior high school to university in Tottori, Japan. Tohoku J Exp Med, September 1, 2008; 216(1): 95-8.

El síndrome de retraso de fase de sueño (SRFS) es una alteración del ritmo circadiano del sueño que comienza típicamente en la segunda década de la vida. El SRFS se caracteriza por insomnio a la hora de acostarse y dificultad para despertarse por la mañana en el momento deseado. Aunque el SRFS se asocia con dificultades para asistir al colegio, su prevelancia es controvertida. Se realizó un estudio en 4.971 estudiantes japoneses, desde educación secundaria a universitaria, de la prefectura de Tottori para dilucidar cambios en la epidemiología del SRFS. Los participantes completaron anónimamente un cuestionario que recogía horarios escolares, higiene de sueño y síntomas de trastornos del sueño. La prevalencia global supuesta de SRFS fue de 0.48% sin diferencias relativas al sexo. La prevalencia más alta se observó en los estudiantes universitarios de último año (1.66%), siendo la más baja en los estudiantes más jóvenes (0.09%). La prevalencia se incrementó a medida que aumentaban los cursos académicos universitarios. Por tanto, un número considerable de estudiantes japoneses están afectados por el SRFS. Los estudiantes universitarios de más edad son más vulnerables a este trastorno que los jóvenes. Horarios escolares adecuados pueden minimizar el conflicto existente entre estos y las necesidades individuales del ciclo sueño-vigilia. Es necesario promover hábitos de sueño para prevenir el SRFS en esta población.

Percepción familiar del sueño infantil. Estudio en 10.000 niños suecos

R. Ugarte 21 Ago 2008 | : Lactante, Niño

Palmstierna P, Sepa A, Ludvigsson J. Parent perceptions of child sleep: a study of 10 000 Swedish children. Acta Paediatr, August 5, 2008;

Objetivo: obtener datos recogidos por las familias sobre el sueño de los niños e investigar los factores que lo influencian.
Métodos: se recogieron mediante cuestionario datos subjetivos de sueño referentes a despertares nocturnos, calidad de sueño, hora de acostarse y hora de leventarse en unos 10.000 niños de edades comprendidas entre el nacimiento y los cinco años. Los datos fueron analizados para tendencias y el sueño se comparó con factores propios como temperamento del niño, origen extranjero, nivel socioeconómico, edad y nivel educativo de los padres y tomas nocturnas.
Resultados: la tendencia de la población fue a mejorar la calidad de sueño a medida que aumenta la edad. Los patrones personales de sueño mostraron cierta estabilidad. Los despertares nocturnos frecuentes y el sueño de baja calidad estuvieron estrechamente relacionados uno con otro y entre los grupos de edad (OR 2.8-60.2, p<0.001). La percepción de sueño infantil escaso estaba influenciado por el temperamento del niño a los 1 y 3 años (OR 2.2-4.4, p<0.001), y en alguna medida por los niveles educativos y edad de los padres a edades de 1-3 años (OR 1.4-2.1, p<0.05), pero no por ser familias monoparentales o por alimentación nocturna. Los despetares nocturnos se asoció con el sueño de baja calidad (OR 1.8-4.7, p<0.05).
Conclusión: a medida que se incrementa la edad, parece ser normal presentar menos despertares nocturnos, mejoría en la calidad del sueño y un esquema de sueño más uniforme. Sin embargo, sueño de baja calidad y despertares nocturnos parecen sorprendentemente estables en edades tempranas. Un temperamento difícil y ser extrajero se asoció con menor calidad de sueño y despertares nocturnos más frecuentes en los primeros años de vida, pero no así pertenecer a una familia monoparental. Finalmente, las tomas nocturnas no parecen condicionar los despertares nocturnos frecuentes.

Calidad de sueño e HTA en adolescentes

R. Ugarte 20 Ago 2008 | : Actigrafía, Adolescente, HTA

Sogol Javaheri, Amy Storfer-Isser, Carol L. Rosen, Susan Redline. Sleep Quality and Elevated Blood Pressure in Adolescents. Circulation. 18 de agosto.

Justificación: valorar si la calidad de sueño se asocia con hipertensión arterial (HTA) en adolescentes sanos.
Métodos y resultados: realizamos un estudio transversal en 238 adolescentes, sin apneas ni otros trastornos comórbidos. Se realizaron varios registros actimétricos en domicilio para obtener datos objetivos de los patrones de sueño.
En unidad de investigación clínica se realizó polisomnografía nocturna, antropometría y nueve determinaciones de tensión arterial en dos días. En base a los datos actimétricos se clasificaron en función de la calidad del sueño (baja eficiencia de sueño cuando era ≤ 85%) y duración corta del sueño (≤ 6.5 horas). La variable principal fue prehipertensión (≥ Percentil 90 para edad, sexo y talla), con tensión arterial sistólica y diastólica como variables secundarias.. Prehipertensión, baja eficiencia de sueño y duración corta de sueño ocurrión en el 14%, 26% y 11% de la muestra, respectivamente. El análisis no ajustado mostró una odds ratio (OR) de prehipertensión incrementada en 4.5 veces (95% IC, 2.1 a 9.7) en adolescentes con baja eficiencia de sueño y 2.8 veces (95% IC, 1.1 a 7.3) en los que presentaban duración corta de sueño. El análisis ajustado por sexo, percentil de índice de masa corporal y estatus socioeconómico, la OR de prehipertensión se incrementó en 3.5 veces (95% IC; 15.5 a 8.0) para baja eficiencia de sueño y 2.5 veces (95% IC, 0.9 a 6.9) para duración corta de sueño. Los análisis ajustados mostraron que los adolescentes con baja eficiencia de sueño tuvieron en promedio 4.0±1.2 mm Hg más alta la TA sistólica que los otros niños (p<0.01).
Conclusiones: una calidad pobre de sueño se asocia con prehipertensión en adolescentes sanos. Esta asociación no es explicada por factores socioeconómicos, obesidad, apnea de sueño o comorbilidad conocida, sugiriéndose que una inadecuada calidad del sueño se asocia con elevación de la tensión arterial.

Es suficiente la adenoamigdalectomía para el tratamiento del SAHS infantil?

R. Ugarte 18 Ago 2008 | : Adenoamigdalectomía, CPAP, Ortodoncia, SAHS

Praud JP, Dorion D. Obstructive sleep disordered breathing in children: Beyond adenotonsillectomy.Pediatr Pulmonol, August 4, 2008;

Tradicionalmente la adenoamigdalectomía (AA) ha sido durante muchos años el tratamiento de elección de los trastornos respiratorios durante el sueño (TRS) en niños. La AA es considerada como un procedimiento seguro que cura el 80% de los TRS en niños. Sin embargo, la experiencia acumulada pone en entredicho esta opinión tan simplista. La AA se asocia invariablemente con morbilidad significativa, dolor postoperatorio y mortalidad, que aunque baja, no puede ser ignorada. Además, al margen de que se desconoce la recurrencia de los TRS en la adolescencia, algunos estudios recientes sugieren que la resolución completa de los TRS no se consiguen hasta en un 75% de los casos después de la AA.
Es de reseñar que recientemente se han propuesto varias opciones de tratamiento que reemplazan o completan a la AA. La presión positiva continua de la vía aérea (CPAP) se sugiere como tratamiento en niños en los que persisten los TRS después de la AA, sin embargo, la adherencia al tratamiento y la adecuación de los equipos son obstáculos importantes, especialmente en niños pequeños y lactantes. Los tratamientos antiinflamatorios, incluyendo los glucocorticoides nasales y/o los antileukotrienos, parecen ser prometedores. Finalmente, los tratamientos ortodóncicos son una opción atractiva, donde resultados recientes sugieren una posible mejoría e incluso una curación de los TRS de manera permanente mediante incremento de la vía aérea nasal y orofaringea.
En conclusión, nos encontramos en un momento ilusionante en el que se han desarrollado nuevos tratamientos para los TRS en niños y donde es urgente realizar estudios clínicos para delimitar sus indicaciones. Mientras tanto, parece que la detección sistemática de anomalías ortodóncicas y una mejor colaboración con ortodoncistas y/o dentistas, es necesaria para decidir la mejor opción terapéutica para los niños con TRS.

SAHS, obesidad y adenoamigdalectomía

R. Ugarte 14 Ago 2008 | : Adenoamigdalectomía, Obesidad, SAHS

Maria T. Apostolidou, Emmanouel I. Alexopoulos, Konstantinos Chaidas, Georgia Ntamagka, Anastasia Karathanasi, Theoharis I. Apostolidis, Konstantinos Gourgoulianis, Athanasios G. Kaditis. Obesity and Persisting Sleep Apnea After Adenotonsillectomy in Greek Children. Chest. Agosto 2008.

Justificación: La importancia relativa de la obesidad y de la hipertrofia adenoamigdalar en la patogénesis de los tratornos respiratorios durante el sueño (TRS) en la infancia no está suficientemente acalarada. La adenoamigdalectomía (AA) no es siempre curativa para los TRS y los niños obesos presentan un riesgo aumentado de enfermedad residual después de la intervención.
Objetivo: el objetivo de esta investigación fue valorar la eficacia de la AA para tratamiento de los TRS en niños obesos y no obesos.
Métodos: se realizó polisomnografía pre y postoperatoria a niños con hipertrofia amigdalar y/o adenoidea que fueron sometidos a AA por TRS. El score z del Índice de Masa Corporal (IMC) mayor de 1.645 se usó como referencia de obesidad. Se estableció un índice de apnea-hipopnea (IAH) inferior a 1 episodio/hora como curación de los TRS.
Resultados: se estudiaron a 22 niños obesos (media de edad ± desviación estandar: 5.8±1.8 años; IMC z score:2.6V0.8; IAH: 9.5± 9.7 episodios/hora) y 48 niños no obesos (edad: 6.9± 2.6 años; IMC z score: 0.09±1.1; IAH: 6±5.4 episodios/hora). Después de la cirugía, los niños obesos y no obesos no presentaron diferencias en cuanto a la eficacia de la AA (postquirúrgicamente IAH < 1 episodio/hora: 22.7% versus 25% respectivamente, p<0.05). La presencia de obesida, hipertrofia adenoidea o amigdalar, sexo y cambios postquirúrgicos en el IMC no fueron predictores significativos de cura de los TRS.
Conclusiones: la obesidad no predice necesariamente un resultado desfavorable de la AA como tratamiento de los TRs.

Inflamación y trastornos respiratorios durante el sueño en niños y adolescentes obesos

R. Ugarte 13 Ago 2008 | : Niño, Obesidad, SAHS

Stijn L. Verhulst, Liselotte Aerts, Sarah Jacobs, Nancy Schrauwen, Dominique Haentjens, Rita Claes, Hilde Vaerenberg, Luc F. Van Gaal, Wilfried A. De Backer, Kristine N. Desager. Sleep-disordered breathing, obesity and airway inflammation in children and adolescents. Chest. Agosto 2008.

Objetivo: investigar la relación existente entre el síndrome de apnea-hipopnea del sueño (SAHS) y el óxido nítrico espirado (eNO) en niños y adolescentes con sobrepeso sin asma ni atopia y conocer si la obesidad per se se asocia a inflamación de la vía aérea.
Métodos: participaron niños con sobrepeso sin síntomas de asma o alergia que acudieron a una clínica de obesidad infantil. Se estableció un grupo control con niños sin sobrepeso, sin asma ni alergia. A todos se les realizó polisomnografía y dos detreminaciones de eNO (mañana y tarde después de la polisomnografía).
Resultados: ajustado por edad, el eNO de la tarde fue significativamente mayor en el grupo de roncadores (14.1 +/- 1.1) comparado con el grupo de peso normal (10.1 +/- 0.8; p = 0.03) y con el grupo con sobrepeso y polisomnografía normal (p = 0.03). Los valores matutinos de eNO fuerno mayores en el grupo con SAHS (12.3 +/- 1.1) que en el grupo control de peso normal (9.9 +/- 0.8; p = 0.047) y en el grupo control con sobrepeso (9.7 +/- 0.7; p = 0.02). El z score del Índice de Masa Corporal no se correlacionó significativamente con el eNO matutino ni vespertino.
Conclusión: este estudio ilustra que tanto el ronquido habitual como el SAHS se asocian con un incremento de la inflamación de la vía aérea en niños con sobrepeso valorado por el nivel de eNO. Además, se demuestra que la obesidad infantil, en ausencia de trastornos respiratorios durante el sueño, no se asocia con aumento de la inflamación en la vía aérea.

REM y obesidad en niños y adolescentes

R. Ugarte 13 Ago 2008 | : Adolescente, Niño, Obesidad

Xianchen Liu, Erika E. Forbes, Neal D. Ryan, Dana Rofey, Tamara S. Hannon, Ronald E. Dahl. Rapid Eye Movement Sleep in Relation to Overweight in Children and Adolescents. Arch Gen Psychiatry. 2008;65(8): 924-932.

Contexto: el sueño de corta duración se asocia con obesidad pero pocos estudios han examinado la relación entre obesidad y estadios fisiológicos específicos del sueño.
Objetivo: examinar los estadíos específicos del sueño, incluyendo estadío REM y estadíos 1-4 de sueño No REM, en relación con obesidad en niños y adolescentes.
Diseño: a un total de 335 niños y adolescentes (55.2% varones; edad 7-17 años) se les realizó durante tres noches consecutivas una polisomnografía estandar y control de peso y talla como parte de un estudio sobre desarrollo de alteraciones internas (depresión y ansiedad). Se calculó el z score del índice de masa corporal (IMC) y estado de peso (normal, riesgo de sobrepeso y sobrepeso) de acuerdo a la edad y el sexo.
Resultados: El IMC z score se relacionó significativamente con el tiempo total de sueño (β = –0.174), eficiencia de sueño (β = –0.027), y densidad REM (β = –0.256) y mayor duración de latencia REM. Después de ajustar por demografía, estadío puberal y diagnóstico psiquiátrico, la reducción de una hora de sueño se asoció con un incremento de casi el doble del riesgo de sobrepeso (odds ratio=1.85), una hora menos de sueño REM se asoción con un incremento de casi tres veces (odds ratio=2.91) y la densidad REM y la actividad por debajo de la media incrementó el riesgo de sobrepeso en el doble (odds ratio=2.18) y en el triple (odds ratio=3.32), respectivamente.
Conclusiones: nuestros resultados confirman las observaciones epidemiológicas previas que relacionan la reducción de sueño con el sobrepeso y que el sobrepeso puede ser atribuido a la reducción del sueño REM. Se necesitan nuevos estudios para investigar los posibles mecanismos que expliquen la asociación entre disminución de sueño REM y los cambios endocrinos y metabólicos que contribuyen a la obesidad.

Subtipos de TDAH y trastornos del sueño

R. Ugarte 13 Ago 2008 | : Somnolencia, TDAH

Susan Dickerson Mayes, Susan L. Calhoun, Edward O. Bixler, Alexandros N. Vgontzas, Fauzia Mahr, Jolene Hillwig-Garcia, Belal Elamir, Linda Edhere-Ekezie, Matthew Parvin. ADHD Subtypes and Comorbid Anxiety, Depression, and Oppositional-Defiant Disorder: Differences in Sleep Problems. Journal of Pediatric Psychology. August 2008.1-10.

Objetivo:se estudiaron los problemas de sueño en niños con trastorno por déficit de atención e hiperactividad (TDAH).
Métodos: los padres completaron cuestionarios (escalas) en 135 niños controles y 681 niños con TDAH de tipo combinado (TDAH-C) o inatento (TDAH-I) con o sin procesos comórbidos como trastorno oposicionista desafiante (TOD), ansiedad y depresión.
Resultados: los niños con TDAH-I aislado fueron los que presentaron menos problemas de sueño y no difirieron de los controles. Los niños con TDAH-C tuvieron más trastornos del sueño que los controles y los niños con TDAH-I. La ansiedad y depresión incrementaron los problemas de sueño pero no el TOD. La somonolencia diurna fue mayor en TDAH-I y se asoció con más (no menos) horas de sueño de lo normal. Los niños medicados tuvieron más problemas para quedarse dormidos que los niños que no recibían medicación.
Conclusiones: se encontraron diferencias en los problemas de sueño en función del subtipo de TDAH, comorbilidad y medicación.

Problemas de sueño y TDAH: efectos sobre el niño y familia.

G. Pin 06 Ago 2008 | : Adenoamigdalectomía, Niño, TDAH

Valerie Sung;Harriet Hiscock;Enma Sciberras; Daryl Efron. Sleep Problems in Children With Attention-Deficit/Hyperactivity Disorder. Prevalence and the Effect on the Child and Family. Arch Pediatr Adolescent Med.2008;162(4):336-342.

Se plantean determinar la prevalencia de los problemas de sueño en niños diagnosticados de TDAH y su asociación con la calidad de vida ,funcionamiento/conducta diaria y asistencia escolar del niño, la salud mental y asistencia al centro de trabajo de los padres, así como con la dinámica familiar.
Entrevistan a 330 familias de niños diagnosticados de TDAH, completando el estudio un total de 239 familias.
En dicha entrevista recogen la existencia de problemas en el sueño de los niños según los padres/cuidadores ( catalogándolos de ausentes, leves, moderados o severos), un índice da calidad de vida infantil (PQLI), una escala de conducta del niño cumplimentada también por los padres, así como la posible existencia de problemas en la salud mental de los padres ( según una escala de depresión, ansiedad, y stress)y en la dinámica familiar ( según subescalas del CHQ- Child Health Questionaire-).
Los problemas de sueño fueron comunes ( casi 3/4 niños), siendo catalogados por los padres como leves en un 28,5% de casos y moderados o severos en el 44,8%.
Los problemas de sueño moderados o severos se asociaron con peor indice de calidad de vida infantil, peor conducta de los niños, peor salud mental de los padres/cuidadores y alteraciones en la dinámica familiar.
Tras ajuste de los posibles factores de confusión, todas las asociaciones se mantenían excepto el impacto familiar.
Comparando los niños con TDAH con problemas de sueño y los que no los presentaban, los primeros llegaban tarde con más frecuencia a clase, y presentaban más absentismo escolar , así como también sus padres llegaban más veces tarde al trabajo.
Un 45% de los padres indicaron que su pediatra les había preguntado acerca del sueño de sus hijos, y de éstos , un 60% recibía tratamiento para problemas de éste.
Los autores concluyen en que los problemas de sueño son muy frecuentes en niños con TDAH, afectando tanto a su calidad de vida como a sus padres/cuidadores y a la duinámica familiar.

Next Page »