Sábado, Noviembre 21st, 2009

Rítmo sueño-vigilia en niños roncadores

R. Ugarte 21 Nov 2009 | : Niño, SAHS, Siesta

Wasilewska J, Kaczmarski M, Citko D, Kowalczuk-Krystoń M, Protas PT, Semeniuk J. Sleep-wake schedules in preschool children who snore. Adv Med Sci Nov 2009; :1-8

Objetivo. Comparar los rítmos sueño-vigilia entre niños preescolares roncadores y no roncadores.
Métodos. Se valoró la duración del sueño nocturno y diurno y los síntomas nocturnos y diurnos en 34 niños preescolares roncadorese (5.38+/-1.21 años) y en 66 niños no roncadores comparables en edad y sexo (5.67+/-1.12 años). El grupo roncador estaba integrado por niños con síndrome de apnea hipopnea del sueño (SAHS) con valores <+3.5 and > -1, el grupo de no roncadores valores inferiores a 1.
Resultados. Los niños roncadores difieren de los no roncadores en duración del tiempo de sueño diurno (51.62+/-28.9 minutoss vs. 10.70+/-20.2 minutos; p<0.001), peron no en el sueño nocturno (10.97+/-0.52 hours vs. 9.83+/-1.34 horas; p>0.05). El porcentaje de niños cno siestas fue mayor en el grupo roncador (47.1% vs. 9.1%; p<0.00004), y los padres informaron de problemas conductuales con más frecuencia en los niños roncadores (41.2% vs. 19.7%; p<0.02). Los odds ratios multivvariante, incluídas variables del periodo nocturno (apnea del sueño) y síntomas diurnos (siestas y respiración oral), mostraron que el sueño regular durante el día fue el factor más predictivo de ronquido (OR=6.1; 95%CI 1.76-21.04; p<0.005).
Conclusión: En niños preescolares, cuando las siestas comienzan a desaparecer, el ronquido puede tener un efecto en el ritmo diurno mediante un incrementeo de la necesidad de sueño diurno.

Excesiva somnolencia diurna, inflamación y anomalías metabólicas en niños obesos con TRS

R. Ugarte 21 Nov 2009 | : Adolescente, Niño, Obesidad, SAHS, Somnolencia

Marina Tsaoussoglou, Edward O. Bixler, Susan Calhoun, George P. Chrousos, K. Sauder, Alexandros N. Vgontzas. Sleep-Disordered Breathing in Obese Children Is Associated with Prevalent Excessive Daytime Sleepiness, Inflammation, and Metabolic Abnormalities. Journal of Clinical Endocrinology & Metabolism , doi:10.1210/jc.2009-0435, Nov 2009.

Introducción. En los adultos obesos, la apnea del sueño se asocia con excesiva somnolencia diurna (ESD) y factores de riesgo cardiometabólicos. En niños, los trastornos respiratorios del sueño (TRS) se asocian prinicipalmente a anomalías anatómicas y alteraciones neurocognitivas, siendo limitados e inconsistentes los estudios sobre alteraciones metabólicas potenciales y ESD.
Objetivos. En este estudio se examinan el efecto conjunto de los TRS y la obesidad en la ESD así como en los marcadores proinflamatorios y metabólicos.
Métodos. Participaron 150 niños de edades comprendidas entre 5 y 17 años, reclutados de manera consecutiva en la Unidad de Sueño del grupo Penn State Children’s Cohort. A todo niño se le realizó una historia clínica y examen físico completo, estudio polisomnográfico de 9 horas de duración y una extracción sanguínea para determinar IL-6, TNF{alpha}, soluble IL-6 receptor, TNF receptor-1, proteína C reactiva de alta sensibilidad, leptina y adiponectina. Además, los padres completaron un cuestionario para valorar ESD. Se realizaron análisis de covarianza en cuatro grupos diferenciados por gravedad del TRS y el índice de masa corporal.
Resultados. La frecuencia de ESD se incrementó progresiva y significativamente en los cuatro grupos. Se observó una tendencia lineal significativa en las concentraciones de IL-6 plasmática, TNF receptor-1, proteína C reactiva de alta sensibilidad y leptina, con los niveles mas bajos observados en los sujetos delgados y los más altos en los que tenían obesidad/sobrepeso con TRS moderado. La adiponectima siguió un patrón opuesto.
Conclusiones. Este estudio sugiere que en una muestra clínica de niños obesos, los TRS se asocian con ESD, elevación de citoquinas proinflamatorias, aumento de leptina y disminución de adiponectina. Todos estos cambios orientan hacia un estado de inflamación/resistencia insulínica, sugiriendo que los niños obesos comparten muchas similitudes con los TRS de los adultos obesos.