Febrero 2010

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Sueño en niños con insuficiencia renal crónica

R. Ugarte 17 Feb 2010 | : Niño, Somnolencia

ME Roumelioti, A Wentz, MF Schneider, AC Gerson, S Hooper, M Benfield, BA Warady, SL Furth, ML Unruh. Sleep and fatigue symptoms in children and adolescents with CKD: a cross-sectional analysis from the chronic kidney disease in children (CKiD) study. Am J Kidney Dis, February 1, 2010; 55(2): 269-80.

Introducción. Aunque los síntomas de cansancio y somnolencia son comunes en adultos con insuficiencia renal crónica (IRC), poco se sabe de la prevalencia de estos síntomas en niños con IRC.
Métodos. Estudio transversal de 301 niños pertenecientes a la cohorte Chronic Kidney Disease in Children en el que se describen la frecuencia y la gravedad de los problemas de sueño y cansancio en relación con la tasa de filtración glomerular (mGFR) y la calidad de vida relacionada (HRQOL). Se usaron el Pediatric Quality of Life Inventory 4.0 y el Listado de Síntomas relacionado con Insuficiencia Renal Cronica para valorar el sueño y el cansancio.
Resultados. La media de mGFR fue 42.0 mL/min/1.73 m(2) (percentiles 25-75, 31.2-53.2) y la edad media fue de 13.9 años (perecentiles 25-75, 10.8-16.2). Los niños con mGFR de 40-<50, 30-<40, o <30 mL/min/1.73 m(2) tuvieron 2.07 (95% CI, 1.05-4.09), 2.35 (95% CI, 1.17-4.72) y 2.59 (95% CI, 1.15-5.85) mayores odds para que los padres informaran de menos energía que los niños con GFR > o= 50 mL/min/1.73 m(2). Comparados con los participantes con mGFR > o = 50 mL/min/1.73 m(2), aquellos niños con mGFR < 30 mL/min/1.73 m(2) tuvieron 3.92 (95% CI, 1.37-11.17) mayores odds de presentar debilidad más intensa, en aquellos con mGFR de 40-<50 mL/min/1.73 m(2) tuvieron 2.95 (95% CI, 1.26-6.88) mayor odds de quedarse dormidos durante el día. Menos energía, problemas de sueño y debilidad se asociaron con puntuaciones menores de calidad de vida relacionada. Los síntomas de cansancio y sueño representan la percepción parental o del niño de la severidad de los síntomas y esto supone una limitación al estudio.
Conclusiones. Menor mGFR se asoció con aumento de la debilidad, menos energía y somnolencia diurna. Además, se observó una fuerte asociación entre problemas de sueño, menos energía y debilidad con descenso de la calidad de vida relacionada. La detección y tratamiento del cansancio y del sueño de mala calidad puede mejorar el desarrollo y la calidad de vida de niños y adolescentes con insuficiencia renal crónica.

Insomnio infantil, patrones de sueño y comportamiento diurno

R. Ugarte 17 Feb 2010 | : Agenda de sueño, Insomnio, Somnolencia

K Velten-Schurian, M Hautzinger, CF Poets, AA Schlarb. Association between sleep patterns and daytime functioning in children with insomnia: The contribution of parent-reported frequency of night waking and wake time after sleep onset. Sleep Med, February 2, 2010.

Objetivo. El propósito de este estudio fue investigar la asociación entre patrones de sueño y funcionamiento diurno en niños con insomnio. Además, se analizó el papel que juega el número de despertares nocturnos y el tiempo de despertar después del inicio del sueño en el contexto de tiempo total de sueño y latencia de sueño.
Métodos. Se reclutaron a familias de niños que referían problemas de sueño con objeto de llegar a su diangóstico y tratamiento si estaba indicado. De las 49 familias que pidieron ayuda, se incluyeron a 34 niños (edad 5.2-10.9 años, media 7.1 años) y a sus padres para el presente estudio. El sueño y los trastornos del sueño fueron valorados mediante entrevista clínica estructurada de acuerdo a los criterios diagnósticos de la Clasificación Internacional de Trastornos del Sueño (ICSD-II). Los padres realizaron una agenda de sueño durante un periodo de dos semanas. Además, contestaron a las preguntas del Child Behavior Checklist relativas a somnolencia diurna de sus hijos así como a una entrevista estructurada para valorar alteraciones mentales comórbidas.
Resultados. La reducción del tiempo de sueño referida por los padres predijo más conductas delictivas y más problemas de concentración. Independientemente del tiempo total de sueño y la frecuencia de los despertares nocturnos, los despertares más prolongados después del inicio del sueño se asociaron a más somnolencia diurna, lo que a su vez predijo más problemas sociales.
Conclusiones. Además del tiempo total de sueño, el tiempo que permanecen despiertos después del inicio del sueño podría ser otro determinante importante para aspectos específicos del funcionamiento diurno de niños con insomnio.

Genómica asociada del SAHS y HDL colesterol

R. Ugarte 14 Feb 2010 | : Obesidad, SAHS

Relf BL, Larkin EK, Torres CD, Baur LA, Christodoulou J, Waters KA. Genome-wide linkage of obstructive sleep apnoea and high-density lipoprotein cholesterol in a Filipino family: bivariate linkage analysis of obstructive sleep apnoea. J Sleep Res Feb 2010;

Introducción. Cada vez son más las pruebas que asocian el SAHS con el Síndrome Metabólico (MeS), tanto en niños como en adultos, sugiriendo un componente genético. Sin embargo, la relación genética con enfermedad no está clara.
Métodos. Se realizó un escaneo de la vinculación del genoma completo bivariado en una única familia filipina con alta prevalencia de SAHS y MeS para explorar las vías genéticas subyacentes en estas enfermedades. Se realizó a una familia amplia de medio rural (n = 50, 50% adultos) un escaneo genómico 10-cM. Se midieron los valores basales plasmáticos de insulina, triglicéridos, colesterol total y HDL colesterol. Se realizó una polisomnografía nocturna para determinar el índice de trastornos respiratorios (RDI) como medición de apnea de sueño. Se calcularon los valores z de índice de masa corporal y resistencia a insulina. Se realizaron análisis multipunto bivariada de los componentes RDI y MeS. La prevalencia de SAHS fue del 46% (n = 23; nueve adultos, 14 niños) entre los participantes. El fenotipo MeS estaba presente en el 40% de adultos (n = 10) y 48% de niños (n = 12). Se demostraron picos de asociación con logaritmo de odds (LOD) score >3 en cromosoma 19q13.4 (LOD = 3.04) para el rasgo pareado RDI y HDL colesterol. Los genes candidatos identificados en esta región incluían los genes KIRs (killer cell immunoglobulin-like receptor). Estos genes están asociados con modulación de respuestas inflamatoria como reacción al estrés celular e iniciación de la formación de placas de ateroma.
Conclusión. Se ha identificado un nuevo locus que vincula genéticamente los índices de trastornos respiratorios y los factores lipídicos asociados con el síndrome metabólico en una región cromosómica que contiene genes asociados con las respuestas inflamatorias.

Trastornos del sueño y quejas somáticas

I. Cruz 13 Feb 2010 | : Insomnio, Niño

Singareddy R, Moole S, Calhoun S, Vocalan P, Tsaoussoglou M, Vgontzas AN ,Bixler EO. Medical Complaints Are More Common in Young School-Aged Children with Parent Reported Insomnia Symptoms. Journal of Clinical Sleep Medicine 5 (6) :549-553, Dec 15 2009.

Introducción. En los adultos se han descrito asociaciones significativas entre problemas de sueño y una variedad de síntomas o problemas médicos. En los niños han sido escasos los estudios que exploran estas complejas asociaciones. En este estudio se analizó la prevalencia de quejas y síntomas médicos en una extensa muestra de escolares .
Material y métodos. Estudio transversal en el que participaron 700 niños de 5 a 12 años de edad de la Penn State Children´s Cohort. A todos ellos se les realizó una historia clínica médica y psiquiátrica, exploración física, polisomnografía nocturna de 9 horas y test neuropsicológicos. Los padres cumplimentaron una serie de extensos cuestionarios sobre el sueño y desarrollo psicomotor de sus hijos.
Resultados. 135 niños (19,3%) presentaron problemas de sueño, en comparación con 565 (80,7%) que no. El insomnio se asoció de forma significativa con la existencia de reflujo gastroesofágico (RGE) y cefalea, tras control de variables demográficas, índice apnea/hipopnea, trastornos del aprendizaje y otros transtornos psiquiátricos y del comportamiento y estatus socioeconómico. Los niños con RGE y cefalea, en comparación con aquellos que no presentaban dichos síntomas, presentaron un riesgo 3,3 y 2,3 veces mayor, respectivamente, de sufrir transtornos de sueño. El tiempo de latencia del sueño se incrementó en el grupo de niños sintomáticos, y hubo diferencias significativas entre ambos grupos en la latencia REM, onda lenta y fase 2 del sueño.
Conclusiones. Estos resultados subrayan la importancia de preguntar sobre problemas del sueño e insomnio cuando los niños presentan quejas y síntomas somáticos, en particular RGE y cefalea, así como de realizar una extensa historia médica a los niños que presentan problemas de sueño.

Complicaciones anestésicas de la adenoamigdalectomía

R. Ugarte 12 Feb 2010 | : Adenoamigdalectomía, SAHS

Raghavendran S, Bagry H, Detheux G, Zhang X, Brouillette RT, Brown KA. An Anesthetic Management Protocol to Decrease Respiratory Complications After Adenotonsillectomy in Children with Severe Sleep Apnea. Anesth Analg Feb 2010;

Introducción. Se conoce la alta incidencia de morbilidad respiratoria después de la adenoamigdalectomí en niños con SAHS. En un esfuerzo por disminuir esta morbilidad, establecimos una guía perioperatoria con recomendaciones y ajustes en la administración de opioides, dexametasona y atropina en niños con SAHS que presentaron episodios recurrentes de hipoxemia aguda durante el estudio perioperatorio de sueño.
Métodos. Revisión retrospectiva y comparación de resultados con datos históricos desde 2001. La variable principal fue intervención médica respiratoria (MMI(Respiratory)). La gravedad del SAHS fue clasificado según el McGill Oximetry Scoring (MOS) y se hizo hincapié en aquellos niños que repetidamente presentaron desaturaciones <80% (MOS4).
Resultados. Cumplieron los criterios de inclusión 292 niños que precisaron adenoamigdalectomía entre octubre de 2002 y febrero de 2006 y a 97 se les asignó MOS4. Once niños (11.3%) precisaron MMI(Respiratory). En 2001, 8 niños (29.6%), asignados con MOS4, precisaron intervención médica respiratoria. Comparando las guías de práctica nuevas y viejas, la odds ratio ajustada para intervención médica respiratoria en MOS4 fue 0.30 (95% CI: 0.10-0.85). Los elementos claves para reducir la intervención médica respiratoria fueron la administración de dexametasona y una dosis pequeña de opiodes. Entre 2002 y 2006, la dosis intraoperatoria de opioides, expresados en equivalentes de morfina, administrados al grupo MOS4 fue de 0.10 mg . kg(-1) (0.06-0.12 mg . kg(-1)), y la dosis de morfina postoperatoria fue de 0.02 mg . kg(-1) (0-0.07 mg . kg(-1)). Ambas dosis fueron menores que las administradas al grupo de comparación, P <0.001.
Conclusiones. Un cambio en la práctica que incluyó la administración de dexametasona y la reducción de la administración de opioides a los niños con hipoexemia recurrente grave redujo la incidencia de intervención médica respiratoria hasta más de un 50%.

SAHS, obesidad, patrones dietéticos y actividad física en niños

R. Ugarte 10 Feb 2010 | : Niño, Obesidad, SAHS

Spruyt K, Capdevila OS, Serpero LD, Kheirandish-Gozal L, Gozal D. Dietary and Physical Activity Patterns in Children with Obstructive Sleep Apnea. J Pediatr Feb 2010;

Objetivo. Valorar los patrones dietéticos y de actividad física y los valores sanguíneos matutinos circulantes de las hormonas orexígenas ghrelina y visfatina en niños con obesidad, SAHS o ambas condiciones.
Métodos. Se identificaron 245 niños de edades comprendidas entre los 6 y 9 años de edad. Después de una polisomnografía nocturna, los cuidadores rellenaron un cuestionario sobre alimentación y actividad física y se realizó a cada niño una determinación sanguínea para medir los niveles plasmáticos de ghrelina y visfatina.
Resultados. Comparados con los controles, los niños obesos con SAHS comieron 2.2 veces más comida rápida, menos comida sana como frutas y vegetales y fueron 4.2 veces menos participativos en actividades deportivas organizadas. El SAHS se correlacionó positivamente con los niveles plasmáticos de ghrelina (R(2), 0.73; P < .0001), pero no con los niveles de visfatina, particularmente cuando la obesidad estaba presente.
Conclusión. SAHS y obesidad en niños puede de manera negativa tener relación con las preferencias dietéticas y puede ser particularmente perjudicial para los patrones de actividad física. Además, los niveles elevados de ghrelina apoyan la presencia de un incremento del apetito y de la ingesta calórica en pacientes obesos con SAHS, lo cual puede posteriormente promover el empeoramiento de los procesos subyacentes.

Asociaciones entre hipertrofia amigdalar y ronquido con sibilancias

I. Cruz 10 Feb 2010 | : Niño, SAHS

Kaditis A, Kalampouka E, Hatzinikolalou S, Lianou L, Papaefthimou M,Gartagani-Panagiotopoulou P, Zintzaras E,Chrousos G. Pediatr Pulmonol 2010, Feb 3 DOI:10.1002/ppul.21174.

Introducción. Se ha correlacionado la historia de sibilancias o asma con la presencia de SAHS, pero aún no se conocen el mecanismo ni las asociaciones epidemiológicas. El objetivo de este estudio fue examinar si la hipertrofia amigdalar podría explicar esta asociación.
Material y métodos. Se reclutó a 442 niños que acudieron al Servicio de Urgencias y a la Clínica de Neumología Pediátrica, que presentaban una edad media de 7,6 +/- 3,6 años. Se investigó en todos ellos la presencia de sibilancias que requirieron tratamiento y de ronquido (en más de una ocasión por semana), así como la existencia de hipertrofia amigdalar.
Resultados. De los 442 niños, 210 presentaron historia de sibilancias. Éstas se asociaron de forma significativa con la presencia de hipertrofia amigdalar y ronquido, incluso tras el ajuste por edad, sexo, obesidad y la condición de fumador pasivo (OR, con intervalo de confianza del 95%, de 2,23 (1,37-3,63), p=0,001, y OR=1,73 (1,12-2,67), p=0,013, respectivamente. Cuando se consideró sólo a los niños con hipertrofia amigdalar (n=92), la presencia de sibilancias se relacionó de forma significativa con el ronquido, mientras que en los niños sin hipertrofia amigdalar (n=350) la existencia de sibilancias no afectó al ronquido (OR=2,76 (1,10-6,93) p =0,031, y OR=1,49 ( 0,92-2,43) p=0,017, respectivamente.
Conclusiones. Los niños con historia de sibilancias presentan con más frecuencia hipertrofia amigdalar que aquellos sin sibilancias. La hipertrofia amigdalar puede explicar en parte la asociación entre el asma y los trastornos respiratorios en niños.

Obesidad, tiempo de sueño y otras rutinas en niños de 4 años

R. Ugarte 09 Feb 2010 | : Niño, Obesidad

Sarah E. Anderson, Robert C. Whitaker. Household Routines and Obesity in US Preschool-Aged Children. Pediatrics 2010, 8 de febrero, doi:10.1542/peds.2009-0417

Objetivo. Determinar la asociación entre la prevalencia de obesidad en niños de edad preescolar y la exposición a tres rutinas domésticas: cenar con la familia, dormir adecuadamente y limitar el tiempo de exposición a pantallas.
Métodos. Análisis cruzado de una muestra nacional representativa de unos 8.550 niños norteamericanos de 4 años de edad que fueron valorados en 2005 y que pertenecían a la cohorte Early Childhood Longitudinal Study, Birth Cohort. Se midió el peso y la talla. Se valoró la asociación de obesidad infantil (BMI ≥ percentil 95) con tres rutinas domésticas: hacer la cena de manera habitual con la familia (>5 noches por semana); dormir adecuadamente por la noche entre semana (≥10.5 horas por noche) y limitar el tiempo de exposición a pantallas (televisión, vídeo, DVD) en días laborables (≤2 horas/día). Los análisis fueron ajustados en función de la raza/etnicidad, obesidad materna, nivel de educación de la madre, ingresos familiares y vivir en familia monoparental.
Resultados. El 18% de los niños eran obesos, 14% estaban expuestos a las tres rutinas y 12.4% no estaban expuestos a ninguna de las rutinas. La prevalencia de obesidad fue 14.3% (95% intervalo de confianza [CI]: 11.3%–17.2%) entre los niños expuestos a las tres rutinas y 24.5% (95% CI: 20.1%–28.9%) entre los niños que no realizaban ninguna de ellas. Después de ajustar las covariantes, la odds de obesidad asociada con la exposición a las 3, 2 o solo una rutina (comparado con ninguna) fueron 0.63 (95% CI: 0.46–0.87), 0.64 (95% CI: 0.47–0.85) y 0.84 (95% CI: 0.63–1.12), respectivamente.
Conclusiones. Los niños preescolares norteamericanos que cenan con la familia, tienen un sueño nocturno adecuado y tienen limitada la exposición a pantallas presentan aproximadamente un 40% menos prevalencia de obesidad que los que no realizan ninguna de ellas. Estas rutinas domésticas pueden ser objetivos prometedores para los esfuerzos de prevención de la obesidad en la infancia temprana.

Efecto del metilfenidato sobre el sueño de niños diagnosticados de TDAH

R. Ugarte 09 Feb 2010 | : TDAH

B.C. Galland, E.G. Tripp, B.J. Taylor. The sleep of children with attention deficit hyperactivity disorder on and off methylphenidate: a matched case–control study. J Sleep Res. 2009 Dec 28.

Objetivo. Valorar los efectos del uso habitual de metifenidato en niños diagnosticados de Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH) sobre el tiempo de dormir, duración y arquitectura del sueño.
Métodos. Cumplieron con los criterios diagnósticos del DSM IV para TDAH 27 niños de edades comprendidas entre los 6 y 12 años y fueron comparados con otros 27 niños controles pareados para edad (±3 meses) y sexo. Se realizaron dos registros polisomnográficos (PSG). Los niños con TDAH fueron asignados de manera aleatoria a recibir metilfenidato o a excluirlo 48 h antes para el primer o segundo registro PSG. Los niños del grupo control fueron pareados por noche, sin recibir medicación. Se usó un modelo mixto en el análisis de los datos para determinar el efecto de la medicación.
Resultados. El metilfenidato en los niños con TDAH prolongó el comienzo del sueño en un promedio de 29 minutos [intervalo de confianza (CI) 11.6, 46.7], redujo la eficiencia de sueño en un 6.5% (CI 2.6, 10.3) y disminuyó el sueño en 1.2 horas (CI 0.65, 1.9). Los índices de arousal se mantuvieron. Las cantidades relativas de estadios 1, 2 y sueño de ondas lentas permanecieron inalterados por la medicación. El sueño REM se redujo (−2.4%) en la noche de la medicación, efecto que no fue significativo cuando los datos de control se incorporaron al análisis. Los datos de PSG de niños con TDAH sin medicación fueron similares a los del grupo control.
Conclusiones. Los datos sugieren que el metilfenidato reduce la cantidad de sueño pero no altera la arquitectura del sueño en niños diagnosticados de TDAH. Una adecuada cantidad de sueño es necesaria para un funcionamieto adecuado durante el día, por tanto los efectos colaterales del metilfenidato puede afectar adversamente los síntomas diurnos.

Correlación entre los hallazgos clínicos y polisomnográficos en niños chinos con SAHS

R. Ugarte 08 Feb 2010 | : Niño, SAHS

Huang J, Ye J, Yang Q, Li P, Li Y. [Correlation between clinic and polysomnographic findings in children with obstructive sleep apnea hypopnea syndrome]. Lin Chung Er Bi Yan Hou Tou Jing Wai Ke Za Zhi Sep 2009; 23(18) :837-9

Objetivo. Evaluar la correlación entre los hallazgos polisomnográficos y el grado de obstrucción causado por la hipertrofia amigdalar y adenoidea en niños con historia clínica de apnea.
Métodos. Se realizó un estudio retrospectivo de niños diagnosticados de Síndrome de Apnea-Hipopnea del Sueño (SAHS) a los que se les realizó polisomnografía y endoscopia. Los pacientes fueron divididos en SAHS y no-SAHS de acuerdo con los hallazgos polisomnográficos.
Resultados. La población a estudiar la componían 94 niños, de los cuales 63 eran varones. La edad media de los niños en el momento de su inclusión en el estudio fue de 6.7 años. Treinta y seis niños diagnosticados clínicamente de SAHS tuvieron polisomnografía normal. No se observaron diferencias entre los niños con SAHS documentado con polisomnografía y los otros. La hipertrofia amigdalar y/o adenoidea no se correlacionó con mayor gravedad de la apnea en los niños del estudio.
Conclusión. No se encontró correlación significativa entre los hallazgos clíncos y polisomnograficos en niños con SAHS.

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