Troxel WM, Lee L, Hall M, Matthews KA. Single-parent family structure and sleep problems in black and white adolescents. Sleep Med. 2013 Dec 25. pii: S1389-9457(13)02029-7. doi: 10.1016/j.sleep.2013.10.012. [Epub ahead of print]

Objetivos. El sueño es esencial para la salud de los adolescentes y está influenciado por el entorno familiar. En este estudio se examinaron la estructura familiar definida como hogares mono vs biparentales en relación a problemas de sueño de los adolescentes.
Material y métodos. Los participantes fueron 242 adolescentes (57 % negros, 47 % niños) sanos (edad media de 15,7 años). El sueño se midió utilizando un auto-informe y la actigrafía de muñeca durante siete noches consecutivas. Los resultados evaluados fueron la duración del sueño medido por actigrafía y la eficiencia del sueño para la semana completa y según fines de semana y los días laborables de la semana por separado, así como la percepción subjetiva de la variabilidad sueño-vigilia y los problemas a la hora de acostarse. Mediante la regresión lineal se examinó la relación entre la estructura familiar y el sueño, después de ajustar por edad, sexo, raza, índice de masa corporal y los síntomas depresivos, la educación de los padres, conflictos familiares y las tensiones por la situación financiera. La raza y el sexo fueron examinados como moderadores potenciales.
Resultados. Después de ajustar las covariables, los adolescentes de los hogares monoparentales presentan una peor eficiencia del sueño durante la semana y una menor duración del sueño los fines de semana. Los adolescentes blancos de los hogares biparentales tenían menos problemas de sueño y vigilia y una menor variabilidad a la hora de acostarse, mientras que los adolescentes negros de los hogares monoparentales tenían la más baja eficiencia del sueño durante el fin de semana. No hubo diferencias significativas entre la estructura familiar y el sexo de los participantes.
Conclusiones. Estos resultados son los primeros en demostrar que la estructura familiar monoparental es un correlato independiente de los problemas de sueño en adolescentes y destacan el papel moderador de la raza.