Meltzer LJ, Johnson C, Crosette J, Ramos M, Mindell JA. Prevalence of Diagnosed Sleep Disorders in Pediatric Primary Care Practices. Pediatrics, May 2010; 10.1542/peds.2009-2725.

Objetivos. El objetivo principal fue determinar la prevalencia de trastornos del sueño en una red asistencial pediátrica siguiendo los criterios de la International Classification of Diseases, Ninth Revision (ICD-9). El objerivo secundario fue valorar las variabeles demográficas relacionadas con estos diagnósticos y examinar la frecuencia de prescripciones empleadas para el tratamiento de las alteraciones del sueño.
Métodos. Se revisaron las historias clínicas electrónicas de 154.957 pacientes (0-18 años) atendidos en consultas programadas de salud en 2007. La información recogida incluyó los diagnósticos según ICD-9, variables demográficas, comorbilidad con trastorno por déficit de atención e hiperactividad (TDAH) y trastornos del espectro autista (TEA), tipo de provisión sanitaria y medicación.
Resultados. A lo largo de todas las edades el 3.7% de los jóvenes tuvieron un diagnósticos de alteración del sueño según la ICD-9. Los diagnósticos más comunes fueron alteraciones del sueño no especificados, enuresis y alteraciones respiratorias durante el sueño. Los predictores de las alteraciones del sueño variaron de acuerdo al grupo de edad e incluyeron parámetros de crecimiento, comorbilidad con TDAH o TEA y proveedor de servicios sanitarios. El 6.1% de los pacientes recibieron medicaciones potencialmente prescritas para trastornos del sueño.
Conclusiones. Este estudio es uno de los primeros en estudiar exhaustivamente los trastornos del sueño según la clasificación ICD-9 en atención primaria en niños de 0 a 18 años de edad. La tasa del 3.7% de pacientes con alteraciones del sueño es significativamente más baja que la prevalencia comunicada en estudios epidemiológicos, lo cual sugiere que en atención primaria puede ser que se infradiagnostiquen los trastornos del sueño en niños y adolescentes. Como sea que los trastornos del sueño son tratables cuando son detectados, este estudio sugiere una necesidad de educación adicional y apoyo en atención primaria para el diagnóstico y tratamiento de los trastornos del sueño pediátricos.